Éste asunto de tener un Blog implica tomar un espacio de tiempo para procurar que usando las palabras y frases adecuadas, poder hacer llegar a otras personas cierta y determinada información. En mi caso, he querido que ésta información se relacione en la mayoría de las oportunidades con mis experiencias, lo cual implica hacer uso de la narrativa descriptiva para lograr el objetivo.
La reflexión anterior está dada por la dificultad que puede implicar usar palabras en un espacio un tanto resumido para explicar lo grato de la experiencia de mi visita a Pomar. Es por esto que los más impresionante de ésta actividad lo dejaré para que lo experimenten por ustedes mismos cuando tengan la oportunidad, me reservaré unos cuantos datos al respecto para que mantengan la expectativa y tan solo les dejaré algunos comentarios:
- Puntualidad, buen gusto y esmero en la atención de los visitantes son algunas de las cosas que caracterizan la visita.
- El programa de la actividad está diseñado para que no quede por fuera ningún detalle de la vendimia, los viñedos, ni de la elaboración de los vinos, además de dar suficiente espacio para entender como se lleva a cabo el proceso, en contacto directo con todos sus elementos, en todas las etapas y con respuesta a todas las preguntas de los asistentes.
- En todo la visita se tiene especial atención en cuento a la cata de los productos y su maridaje.
- El ambiente festivo es uno de los elemento que resalta, sobre todo porque se encuentra lleno de un sabor venezolano que nos contagió de gran entusiasmo y alegría a los que allí nos encontrábamos.
- Finalmente, no saben la alegría que me dio conocer de primera mano el inmenso logro de ésta empresa venezolana que aquí, en nuestro país, hace uso de los maravillosos recursos con que ha sido bendecida nuestra tierra para elaborar productos de altísima calidad, los cuales estoy segura darán que decir de Venezuela en cuanto a lo que a la elaboración de vinos respecta, o al menos eso espero.
Sencillamente o en pocas palabras, es algo que está hecho con mucho cariñito, sin reparar en detalles o en calidad.
Lo que más me gustó fue: La visita a las Bodegas, el recorrido conociendo el proceso de elaboración del vino, la cena, el paseo por el viñedo, el desayuno, el paseo en globo y la pisada de uvas. Los que ya han vivido ésta experiencia saben de que estoy hablando.
Nuestro Guía fue el Ing. Guillermo Vargas, le mando mis saludos y le agradecemos mucho por su atención y gran amabilidad. Por cierto, se llama como mi papá, lo cual resultó muy grato.
Y como siempre, como una imagen vale más que mil palabras... algunas fotos!